Una persona asexual puede encontrarse con muchas preguntas y dudas de los demás a lo largo de la vida. Siendo el sexo un factor indispensable en la vida de muchos individuos, les resulta difícil entender la asexualidad.
¿Cómo puede haber alguien que no sienta ninguna atracción sexual? ¿Es esto posible? La asexualidad es, de hecho, una orientación sexual con muchas particularidades. La experiencia de las personas asexuales tiende a ser solitaria ya que pocos entienden el desinterés por el sexo.
Asimismo, la escasez de información sobre esta orientación sexual y las representaciones caricaturescas contribuyen a los malentendidos. ¡Pero no siempre tiene que ser así! Con empatía y conocimiento, es posible comprender y respetar a las personas asexuales por sus preferencias y necesidades sexuales.
¿Qué es la asexualidad?
Una persona asexual experimenta poca o ninguna atracción sexual. Pero eso no significa que esta persona no tenga relaciones sexuales, besos y abrazos bajo ninguna circunstancia. Puede sentirse atraída románticamente por otro individuo, además de disfrutar tocar y tener el deseo de estar en una relación afectiva.
La asexualidad se entiende como un amplio espectro que reúne diferentes niveles de falta de atracción sexual y romántica. La atracción romántica es diferente de la atracción sexual. El primero se refiere al deseo de tener una relación romántica y realizar actos románticos, mientras que el segundo está vinculado al deseo de tener contacto sexual con otra(s) persona(s).
Las personas asexuales experimentan diferentes grados de ambos tipos de atracción, por lo que no se puede decir que todos sean iguales. Por ejemplo, revisa algunas orientaciones sexuales que caen bajo el espectro de la asexualidad:
• Demisexual: la persona siente atracción sexual sólo después de desarrollar un vínculo afectivo con otra persona.
• Asexual estricto: persona que no siente atracción sexual en ningún momento;
• Graysexual: una persona que siente atracción sexual sólo bajo ciertas circunstancias.
• Fraysexual: persona que siente atracción sexual sólo cuando no existe un vínculo afectivo formado.
• Cupiosexual: una persona que no se siente atraída sexualmente por los demás, pero tiene un deseo sexual y el deseo de tener una vida sexual activa.
• Asexual fluido: persona que a veces se siente demisexual, a veces se siente grissexual. En otras palabras, alguien cuyos deseos sexuales ocasionalmente fluctúan.
¿Cómo sé si soy asexual?
¿Tienes dudas sobre tu orientación sexual y crees que podrías ser asexual? Para llegar a una conclusión, necesitas pasar por un pequeño proceso de autoconocimiento y reflexionar sobre tus experiencias de vida y sentimientos. Puedes hacerte las siguientes preguntas para tratar de entenderte:
• ¿Siento atracción sexual?
• ¿Me atraen otras personas, sean del sexo opuesto o del mismo sexo?
• ¿Me siento presionado para disfrutar del sexo debido a la influencia de amigos, familiares, cónyuges y los medios de comunicación?
• ¿Alguna vez me he obligado a participar en actos sexuales o románticos para no sentirme inadecuado?
• ¿Siento que hay algo malo en mí porque no me atraen sexualmente las personas que me rodean?
• ¿Puedo disfrutar de mi vida sin tener que tener contacto sexual?
• ¿Siento que puedo conectarme emocionalmente con otra persona sin necesidad de sentir atracción física o sexual?
• ¿Qué valoro en una relación amorosa?
• ¿Cómo me ve mi pareja?
Si tus dudas son múltiples y tienes dificultades tanto para comprender como para aceptar tu orientación sexual, puedes buscar ayuda psicológica. Además de promover el autoconocimiento, la psicología trabaja la autoaceptación para que la persona en crisis deje de sufrir por ser quien es.
Las personas asexuales pueden relacionarse
Las personas asexuales no solo pueden tener relaciones románticas, sino que muchas quieren tener citas, casarse y tener hijos. Las relaciones no se tratan solo de sexo, por lo que las parejas con diferentes necesidades sexuales también pueden ser felices juntas.
La ausencia total o no de atracción sexual significa que las personas asexuales experimentan el sexo, las citas, el matrimonio, la masturbación, el orgasmo, la excitación sexual y otros temas que involucran la sexualidad humana de manera diferente. Sin embargo, tienen las mismas necesidades emocionales que las personas con otras orientaciones sexuales.
Para que la relación entre una persona asexual y una persona de otra orientación sexual funcione, el diálogo, la madurez y la empatía son fundamentales. El amor, el compañerismo, el interés y la intimidad pueden estar presentes en la relación, incluso en ausencia de sexo. Por lo tanto, la pareja debe llegar a un acuerdo sobre lo que se considera aceptable y lo que no. Es posible que se produzcan relaciones sexuales, pero con menos frecuencia para que ambos miembros de la pareja estén satisfechos con la relación. Para eso, la pareja necesita hablar. En el proceso, los cónyuges pueden incluso descubrir que disfrutan aspectos específicos del sexo o los abrazos, lo que mejora sus experiencias sexuales.
Falta de libido, celibato, abstinencia sexual y asexualidad
Por lo general, una persona asexual tiene poco interés en las interacciones sexuales con otras personas. Es diferente a perder el interés por el sexo u optar por la abstinencia. La abstinencia sexual y el celibato son opciones. En ambas circunstancias, un individuo elige no tener relaciones sexuales, lo que puede o no ser una decisión temporal. En el caso del celibato, esta decisión puede estar motivada por motivos religiosos, culturales o personales.
Ya la falta de libido es la disminución del deseo sexual, que puede estar relacionada con diversos problemas de salud. La libido baja a menudo afecta el bienestar y la dinámica de las relaciones, especialmente cuando ocurre de repente. Acostumbrados a un cierto ritmo en su vida sexual, la pareja puede entrar en conflicto cuando uno de los cónyuges sufre de falta de libido. Para averiguar cuál es el problema, debe consultar a un médico.
La asexualidad no es una condición de salud
Muchos creen que si a alguien no le gusta el sexo, tiene un problema de salud mental o físico. La creencia inicial es que todos los seres humanos deberían experimentar atracción sexual. La persona asexual, entonces, debe preocuparse por su estado de salud y buscar tratamiento.
Al igual que la heterosexualidad y la homosexualidad, la asexualidad es solo una orientación sexual. No hay nada de malo en ser asexual. Cualquiera que no tenga interés en el sexo no debería sentirse mal por ello, incluso si escucha comentarios desagradables de los demás.